Un paso más. Así ven los brasileños su victoria de hoy por 2-1 sobre la selección de Colombia en los cuartos de final de la Copa del Mundo de la que son anfitriones, y pese a que su objetivo aún no se cumple, el resultado es suficiente para celebrar.
Las calles de Río, como de buena parte del país, parecían casi desiertas desde temprano, pues cuando la selección “verdeamarela” juega, el día es feriado y prácticamente nadie trabaja.
Pese a que mostró mejor juego que en partidos anteriores, los brasileños no dejaron de sufrir ante una selección de Colombia que tampoco exhibió el buen nivel que se le vio en la primera fase y los octavos de final ante Uruguay.
El 2-1 es suficiente para que Brasil llegue a las semifinales en las que enfrentará a Alemania, selección que jugó hoy en Río ante Francia y le alcanzó el 1-0 en el marcador para estar en la siguiente fase.
Tras terminar los partidos de hoy, las calles de Río de Janeiro fueron recuperando poco a poco su actividad, hasta convertir cualquier esquina en un punto de fiesta llena de camisetas amarillas y verdes.
Alguna pequeña comparsa también salió a la calle para festejar con la gente la victoria de hoy, mientras que el canto “Eu sou brasileiro” se repite una y otra vez por toda la ciudad.
Junto a los brasileños también celebran los alemanes, quienes entonan sus gritos de barra para animar a “Deutschland” como lo hicieron hoy durante el partido en el mítico Maracaná.
Hoy Brasil no duerme, Brasil celebra, aunque la fiesta grande aún está pendiente.