Deliro por dentro
(¿Cómo vivir con una persona
que padece esquizofrenia?)
Ana Virginia Duarte
Testimonio
Instituto de Estudios de la Mujer
Universidad Nacional
2013
Desde el drama personal que conlleva vivir con un hijo esquizofrénico, la autora de este libro, Ana Virginia Duarte, comparte esa dura experiencia de un modo sincero, directo, claro y por eso muy valioso y quizás más útil, para quienes se encuentren en esa situación o en similares, de lo que pueden ser los libros teóricos que tocan el tema.
Con el propósito de ayudar a otros que convivan con personas que padecen esta enfermedad, a comprender y administrar las múltiples o complejas emociones que pueden enfrentar, esta madre abre su corazón y cuenta paso a paso lo que ha vivido para poder construir la relación nueva con su hijo desde que fue diagnosticado.
Dice la autora en la introducción:
“Este libro tiene como objetivo contribuir a la sensibilización de la población en general, y de las familias en particular, sobre lo que significa el manejo cotidiano de las diferentes manifestaciones de las enfermedades mentales, sobre todo desde el lugar de la comprensión, aceptación y tolerancia…”
Efectivamente, este testimonio permite ese acercamiento a la enfermedad que otros textos quizás no logran, porque ese no es su interés, y es ese proceso emocional que atraviesan quienes conviven con el enfermo.La importancia de compartir experiencias es fundamental, pues, si bien es cierto cada una tiene sus propias características, existen muchas semejanzas, preguntas, dudas, angustias, situaciones complejas, que al compartirse se pueden comprender mejor.
“…lo que hoy escribo sobre la experiencia, no es ninguna receta mágica, sino más bien es ver la misma como un conjunto de ingredientes, y que alguno de ellos podrá ser aplicado a una situación concreta, que alguien en particular vive o conoce.”
Con su experiencia de más de una década de tratar con su hijo enfermo, la autora ha ido en un proceso de aprendizaje estratégico que le ha permitido importantes logros y mejorías en la relación con su hijo y en el manejo de este de su propio padecimiento.
Duarte está clara en que las redes de contención y apoyo son esenciales no solo para auxiliar a los familiares o asistir a los mismos enfermos, sino para ayudar a la sociedad en general a comprender y vivir con las enfermedades mentales.
En ese sentido explica: “…si bien los centros hospitalarios y el Psiquiátrico particularmente, cumple una importante labor de atención para los casos de emergencia y estabilización mental, no podemos atribuir a este centro hospitalario la notable función de dar permanentemente apoyo y contención emocional a las personas que sufren algún tipo de enfermedad mental, pues el tema de las recurrentes recaídas, seguramente es posible preverlo mediante una atención integral sistemática…”
Vivir con la esquizofrenia requiere en primer término superar la estigmatización que existe sobre las enfermedades mentales y sobre esta en particular, para comprender mejor sus manifestaciones y características, las alteraciones de la conducta que producen y las necesidades de un tratamiento integral.
La condición de incurable de una enfermedad como la esquizofrenia, no quiere decir que no sea tratable y que se puedan lograr importantes mejorías que permitan una convivencia del paciente con sus seres queridos.
Este sincero y aleccionador testimonio permite conocer de cerca una situación compleja y a la vez resulta una voz esperanzadora para muchos que pueden enfrentar una enfermedad que, por desconocimiento, muchas veces resulta muy difícil tratarla o convivir con ella.