Además de invertir bien el aguinaldo, las personas deben extremar las medidas de seguridad cuando retiren dineros en los bancos o cajeros automáticos, para no ser asaltados. (Foto: Katya Alvarado)
Ahorro, pago de deudas y disfrute de la familia en los días libres de fin de año son opciones que cada trabajador debe considerar a la hora de decidir el mejor uso del décimo tercer mes de salario, o aguinaldo, que recibe en estos días.
En el caso de ser una persona muy endeudada, lo que recomiendan los especialistas es que dedique todo lo que pueda del aguinaldo a disminuir las deudas, sobre todo si son obligaciones que se han venido acumulando en el transcurso del año.
No es aconsejable, sin embargo, que lo emplee todo en deudas, pues es importante que dedique una parte a la familia, según recomienda Mario Arroyo, gerente de la Junta Administradora de Ahorro y Préstamos de la Universidad de Costa Rica.
Generalmente –dice–, las familias piensan en ‘regalitos’, en las posibilidades de tener un poco de actividades en este tiempo en que tienen días libres y pueden estar juntas. “Y es que si todo el año estuviste con la excusa de que no hacías nada porque no tenías plata, es importante destinar a esto parte del aguinaldo, que es un salario completo”, indicó.
A AHORRAR
Ahora bien, si la persona no tiene muchas deudas, lo que se recomienda es que ahorre parte de este dinero.
A propósito de esto, Arroyo recordó una frase del economista Eduardo Lizano, que dice que el crecimiento de las personas depende del ahorro. Quiere decir que a mayor ahorro, mayor crecimiento, puntualizó.
Se supone que si una persona tiene la capacidad de ahorrar una buena parte de su aguinaldo, las eventualidades que le vayan a ocurrir en el transcurso del año estarán cubiertas. Entonces, se trata de tener un ahorro para atender eventualidades en el año y cualquier vicisitud que se presente durante los 12 meses que median hasta la llegada del próximo aguinaldo, agregó.
De acuerdo con Arroyo, entre la gente universitaria, cada vez más, hay una tendencia y una cultura hacia al ahorro.
“Puedo decir que la gran mayoría de los funcionarios universitarios dejan una parte importante del aguinaldo en la Junta como ahorro. Sí hay un grupo de funcionarios, y me imagino que de costarricenses en general, que está muy endeudadillo; pedirle a ellos esto es muy difícil. Son gente que vive a ‘coyol quebrado coyol comido’. Pero, gracias a Dios la mayoría usa parte de su aguinaldo para el ahorro”.
“Nosotros tenemos un incremento de actividad, porque la gente viene a dejarnos parte de su aguinaldo para ahorro”, detalló Arroyo.
En caso de querer hacer una inversión, una buena opción para la población universitaria es la Junta de Ahorro, ya que no hay nadie que pague las tasas de interés que paga la Junta, aseguró.
Eso sí, insiste que aun en el caso de quienes están endeudados, es aconsejable que dejen una parte para disfrutar con la familia alguna actividad. Las deudas se saldan con el sueldo mensual y si ha venido sacrificando a la familia todo el año, en este momento que le llega un poco de dinero que no tenía es prudente que dedique parte a la familia.
A su parecer, esto entra en un concepto muy importante, que es el bienestar y la calidad de vida. El aguinaldo no se hizo para pagar deudas, se hizo para que la gente creciera, para los regalos de diciembre; hay gente que lo usa para pagar una matrícula o para estudio, acotó.
Si bien hay un grupo particular que por determinada circunstancia está muy endeudado y no encuentra otra posibilidad que aplicar el aguinaldo a la deuda, es recomendable que tome una parte para ir con los suyos a las fiestas de Zapote o, por lo menos, a comerse un bocadito. Es el momento de hacerlo con el aguinaldo, “porque si estás endeudado e intentás hacerlo con el sueldo no lo vas a hacer nunca”, reiteró Arroyo.