En estos días, todo el país se ha puesto de pie para clamar por justicia y expresar su indignación por el atroz asesinato de un bebé de 2 años ocurrido en Los Chiles. Este acto tan grotesco nos terminó de horrorizar cuando se informó que el bebé fue previamente abusado sexualmente y torturado.
A pesar del clamor de algunas voces, creo firmemente que el Derecho Penal no solucionará el problema de la violencia intrafamiliar, ni va a disminuir las horrorosas estadísticas de violencia que se registran a diario en el Hospital Nacional de Niños (HNN) y en el Patronato Nacional de la Infancia (PANI). Como legislador, estoy más preocupado por prevenir la violencia intrafamiliar, que por aumentar las penas de cárcel a las personas agresoras.El Hospital Nacional de Niños y el Patronato Nacional de la Infancia nos han suministrado algunos datos estadísticos sobre la violencia contra la niñez y la adolescencia en Costa Rica, durante el último cuatrienio (2010-2014).
Egresos por agresión a niñas y niños*
Periodo 2010-2014
Conducta |
Total |
2010 |
2011 |
2012 |
2013 |
2014 |
Negligencia o abandono |
30 |
8 |
5 |
2 |
8 |
7 |
Abuso físico |
140 |
33 |
29 |
20 |
13 |
45 |
Abuso sexual |
82 |
19 |
14 |
22 |
12 |
15 |
Abuso psicológico |
4 |
0 |
0 |
1 |
2 |
1 |
Otros síntomas de maltrato |
11 |
6 |
2 |
2 |
1 |
0 |
Totales |
267 |
66 |
50 |
47 |
36 |
68 |
*Fuente: Dirección del HNN, 2015.
En promedio, tenemos que se presentan 5 casos de niños y niñas que han sido atendidos/ingresados en el Hospital de Niños mensualmente. Esta violencia contra la niñez permanece a la sombra, no llega a conocimiento del HNN y por tanto sigue impune.
Las estadísticas que nos suministró el PANI son más reveladoras, porque ahí se contabiliza todo tipo de violencia contra la niñez y la adolescencia, aunque no hayan requerido hospitalización.
Registro de casos de violencia contra la niñez y la adolescencia – 2014*
Víctimas totales de situaciones de violencia |
52.124 |
Llamadas al 911 solicitando ayuda |
43.581 |
Trabajo con familias en prevención |
40.000 |
Acompañamiento en redes sociales hacia las personas adolescentes |
120.000 |
Acompañamiento en redes sociales hacia padres y madres |
70.000 |
*Fuente: PANI, 2015
Estos números son realmente terroríficos y demuestran que en nuestros hogares hay una guerra desatada, donde las víctimas principales resultan ser siempre las personas más vulnerables: niñas y niños, adolescentes preferentemente femeninas, mujeres dependientes económicamente del jefe de hogar y adultos mayores. El dato de casi 14.000 embarazos anuales de muchachas entre 15 y 19 años, no puede ser más alarmante:
Embarazos adolescentes*
Año |
Menores de 15 |
De 15 a 19 años |
2011 |
477 |
13.392 |
2012 |
522 |
13.762 |
2013 |
473 |
12.451 |
*Fuente: PANI, 2015
Creemos que el mejor camino a seguir para revertir estos números es generando nuevos valores, una nueva actitud en las personas y educarlas en valores para la convivencia. Creo que es un problema cultural, de nuestra forma de vivir y ver el mundo. Hemos perdido una serie de valores morales que antes nos permitían vivir pacíficamente y hoy nos tienen a las puertas de una debacle social.
Motivado por esta urgente situación, he presentado a la corriente legislativa un proyecto de ley (Expediente Nº19.467), para financiar la promoción de una cultura de paz en los hogares.
El proyecto plantea financiar una campaña permanente de promoción de una cultura de paz en los hogares, a través de los enormes presupuestos de publicidad de bancos y otras empresas comerciales del sector público, que destinan en conjunto aproximadamente unos ¢26 mil millones al año para publicidad e información. Nuestra propuesta es que se destine un 25% de esos recursos presupuestados para financiar, con la propia imagen institucional del patrocinador, la promoción de una cultura de paz.
Nunca un dinero público destinado a publicidad sería mejor utilizado que financiando programas de formación de valores para una cultura de paz; que es un programa para salvar vidas y permitirnos vivir en una sociedad que respete y venere la vida como valor supremo del ser humano y que tenga la solidaridad como un sustituto del individualismo que nos está matando como sociedad.