El sector social piensa que la crecida presencia del PAC y el Frente Amplio en la Asamblea Legislativa dará buenos resultados al pueblo y los trabajadores. (Foto: Laura Rodríguez)

El movimiento social de Costa Rica se encuentra satisfecho con los resultados de los comicios electorales realizados el pasado 2 de febrero, sobre todo porque consideran que el pueblo hizo eco de lo que venían planteando hace años, de la necesidad de un cambio en el rumbo de las políticas públicas del país.

Entre los aspectos que consideran un triunfo, está la gran diversidad partidaria que tendrá la Asamblea Legislativa, especialmente de partidos políticos con intenciones de hacer oposición al gobierno de turno.

El crecimiento del número de representantes del Partido Frente Amplio (FA) en el Congreso, así como del Partido Acción Ciudadana (PAC), y la reducción del número de legisladores por el Movimiento Libertario, hace sentir al movimiento social que habrá  más oportunidades de impulsar iniciativas con mayor visión de justicia social.

Por otra parte, aunque aún está pendiente la segunda ronda electoral entre el candidato del PAC, Luis Guillermo Solís, y Johnny Araya, del Partido Liberación Nacional (PLN), los dirigentes de organizaciones sociales coinciden en que el partido de gobierno fue el gran perdedor, al quedar en el segundo puesto de votos recibidos.

Están convencidos de que los costarricenses les cobraron a los partidos de derecha las grandes denuncias de corrupción y el deterioro de las condiciones de las principales instituciones del país, como la Caja Costarricense de Seguro Social, el Instituto Costarricense de Electricidad, la educación pública, entre muchos otros.

Los representantes consultados por UNIVERSIDAD ven como un triunfo los logros electorales obtenidos por los candidatos de la oposición, sobre todo porque sienten que son más cercanos e identificados con las necesidades de los trabajadores y el pueblo en general.

ALIANZAS SERÁN INDISPENSABLES

Para Luis Chavarría, secretario general de la Unión Nacional de Empleados de la Caja y la Seguridad Social (Undeca) uno de los caminos más importantes es que el PAC y el Frente Amplio logren desarrollar alianzas, que permitan resolver los principales problemas que aquejan al país.

“Fue una sorpresa la gran cantidad de votos que obtuvo el Frente Amplio, por lo que ahora no podrá ser una bancada ignorada; tendrá una gran presencia en la Asamblea, pero tampoco podrá ser ignorada en la segunda ronda electoral, pues muchos de los que votaron por este partido, lo que buscan es un gobierno que se aparte de la política neoliberal, la corrupción y se acerque más al fortalecimiento de las instituciones públicas”, argumentó Chavarría.

Por su parte, Albino Vargas, de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados, cree que la coyuntura les permitiría a las organizaciones sociales posicionar una agenda social, con un sentido estratégico.

Por ejemplo, considera que se podrían plantear soluciones integrales a los temas de la Caja, la reforma procesal laboral, la transformación tributaria, la recuperación de la agricultura nacional, el tema de salarios mínimos y empleos.

“En esta ocasión quedamos con una Asamblea Legislativa donde tenemos grandes amigos del sector social, que son sensibles a las temáticas que realmente afectan al pueblo”, indicó Vargas.

Otro representante sindical que está convencido de la necesidad de desarrollar alianzas −tanto en el Frente Amplio como con el PAC− es Fabio Chaves, de la Asociación Sindical de Trabajadores Eléctricos y de Telecomunicaciones (Asdeice).

En su opinión, no se trata de alianzas solo entre los partidos, sino con el sector social, porque precisamente la fuerza que impulsó al Frente Amplio fueron esos movimientos sociales, y advirtió sobre su presencia y fuerza en las zonas en que el PAC salió más débil.

“Tenemos que entrar en entendimientos para que exista una verdadera gobernabilidad en el país y así poder sacar proyectos de justicia social e incluyentes. Consideramos que el PAC es un partido muy maduro, con gente de mucho peso en la Asamblea Legislativa y desde luego contamos con grandes amigos del Frente Amplio”, añadió.

Adicionalmente señaló que el sector energético y de telecomunicaciones ya tiene avanzadas conversaciones con el PAC, para impulsar una agenda que beneficie al país.

NOTA 2

Sector social ante dos escenarios

Aunque los dirigentes de organizaciones sociales estiman que ya han ganado por la diversidad de partidos con mayor conciencia social que quedaron en la Asamblea Legislativa, lo cierto es que el partido que gobernará aún no está definido.

Ante esta situación, los representantes sindicales se plantean dos escenarios muy distintos si gana en segunda ronda Luis Guillermo Solís o Johnny Araya.

Todo apunta a que el movimiento social prefiere, por diversas razones, un gobierno impulsado por el PAC, ya que consideran que habría una mayor viabilidad de que esta tendencia impulse iniciativas para fortalecer y rescatar la salud costarricense, que le den oxígeno a la educación pública, y a la generación de mayores oportunidades para los jóvenes.

“En cuanto a la Caja, me parece que debe haber una cirugía mayor y en el caso del PAC, aunque hay fuerzas sociales que no votaron por ellos −pero sí votaron por el Frente Amplio−, con quienes tienen ciertas coincidencias. Esperamos del PAC el cumplimiento de su obligación ética, moral y patriótica de rescatar la institución y garantizar una estrategia que revierta las políticas privatizadoras de los gobiernos pasados”, detalló Luis Chavarría, de Undeca.

También esperan del PAC acciones que eliminen la figura de las presidencias ejecutivas, que se despolitice la CCSS y otras entidades, que se democratice la elección de puestos altos y medios, que se castigue fuertemente la evasión, subdeclaración y las enormes deudas que hay con la salud social.

Otro deseo es que el cambio de gobierno signifique la mejora de la atención de los usuarios y las condiciones de los trabajadores, que se trabaje en fortalecer las pensiones y el mejoramiento estructural de los centros de atención de salud.

Por su parte, Albino Vargas, de la ANEP, confía que el PAC lograría contrarrestar la hegemonía del capital y alcanzar articulaciones estratégicas de mediano y largo plazo, para tener transformaciones más profundas hacia la inclusión y justicia social.

Con respecto a una nueva administración de Liberación Nacional, están convencidos que no sería tan fácil gobernar, pues la gran oposición que hay en la Asamblea Legislativa disminuiría mucho su campo de acción.

“En el caso del sector energético, el daño ya está hecho, no es posible echar para atrás en el proceso neoliberal de apertura; sin embargo, el PAC podría ejercer un mayor control en las instituciones fiscalizadoras, para garantizar al Instituto Costarricense de Electricidad condiciones iguales”, comentó Fabio Chaves, de Asdeice.

De acuerdo con el sindicalista, ni siquiera se plantea la posibilidad de un gobierno de Liberación Nacional, al estar seguro de que el pueblo ya demostró que lo que busca es un cambio.

Resultados alentadores, para el sector ambiental

Otro movimiento que se siente satisfecho por los resultados de las elecciones es el ambiental, el cual centra esperanzas en que será muy positivo el tamaño de la representación legislativa que tendrán el PAC y el Frente Amplio.

También celebran la reducción al mínimo de los diputados del Movimiento Libertario, dado que consideran que es una de las bancadas que más ha afectado al sector, por el papel que tuvieron en los proyectos del agua y otros temas ambientales, como la búsqueda de apertura de los parques nacionales y su posición contra la planificación rural.

“Vemos con buenos ojos el crecimiento de los partidos progresistas como el PAC y el Frente Amplio, y esperamos que esto se refleje en la toma de decisiones en el Congreso, Con respecto al gobierno, para nosotros sería muy beneficioso que el PAC quede electo como el ganador en segunda ronda, pues es un partido que nos abrió las puertas a las organizaciones ambientales para empujar iniciativas; con ellos tenemos coincidencias”, puntualizó la ambientalista Heidy Murillo.