Miembros del PAC consideran que ya había una campaña del miedo en marcha para desprestigiar al partido. (Foto: archivo)
“La campaña hacia la segunda ronda de votación se presenta muy difícil y llena de obstáculos, los recursos y el tiempo son tan limitados como intensa es la tarea de revertir la tendencia contraria. Por razones éticas es inaceptable el recurso a tácticas innobles con el fin de variar las percepciones políticas”.
Así lo leyó Araya en conferencia de prensa, y quedó en quienes lo escucharon una sensación de que podría haber recibido presiones o instado a recurrir a estas “tácticas innobles”, para lograr revertir la tendencia que las encuestas venían marcando y que planteaba como posible ganador a su opositor, Luis Guillermo Solís del Partido Acción Ciudadana (PAC).
Incluso hay quienes consideran que esa propaganda “innoble”, o sucia, ya se venía dando. Prueba de ello fue la conferencia de prensa que llevó a cabo un grupo de miembros de campaña del PLN, en la cual culparon al PAC por la especulación del dólar, al no definir a su equipo económico. Sin embargo, en dicha conferencia, el candidato Araya no participó.
¿PRESIÓN INTERNA?
Para el analista político Víctor Ramírez, dicha frase lo que indica es que probablemente algunos asesores, nacionales o extranjeros –incluso ambos− le aconsejaron que dada la abismal diferencia entre él y su contrincante, la única manera de revertir, al menos parcialmente la tendencia, sería con este tipo de campaña.
“Al parecer, Araya lo que está diciendo es “yo no voy a entrar en ese campo, por lo tanto me salgo”; claro que hay que entender que este tipo de campaña sucia podría no tener ninguna repercusión, sino convertirse en un búmeran, ser contraproducente para él, pero también deja espacio para la conclusión de que no había nada que pudiera cambiar la decisión del electorado costarricense”, explicó Ramírez.
De hecho, en un recuento publicado por el diario La Nación el 8 de marzo, acerca de lo sucedido entre el martes 4 y el miércoles 5, el jefe de campaña del PLN, Antonio Álvarez, admitió que en la mañana de ese martes el equipo de imagen valoraba la necesidad de cambiar el tono de la campaña “por uno más confrontativo”.
“Nadie me las ha sugerido pero yo sé que cuando uno está por debajo en encuestas siempre existe esa posibilidad de hacer campaña negativa, yo no me sentiría bien recurriendo a eso”, dijo Araya en una entrevista publicada en el diario Extra el 8 de marzo.
Por su parte, el politólogo Francisco Barahona consideró que la dimisión del candidato del PLN es optimista y demuestra cierto nivel de integridad, desinterés y sacrificio, pues en sus propias declaraciones públicas, afirmó que no quiso recurrir a una campaña sucia para cambiar el voto.
Para el experto, a raíz de la declaración del 5 de marzo se puede pensar que probablemente algunos estrategas del equipo del PLN trataron de impulsar una campaña del miedo, que inicialmente funcionó con el Frente Amplio y pensaban aplicarla en la segunda ronda.
“Uno tiende a pensar con malicia indígena que detrás de esa frase de Johnny Araya hay una especie de denuncia sobre acciones que no son éticas y que el candidato no las acepta; a lo mejor había elementos bastante delicados que podrían incitar al engaño, pero estas son puras sospechas, basados en lo que él indicó en su discurso”, añadió Barahona.
El especialista agregó que esto alerta sobre la posibilidad de que se venía gestando una campaña para desprestigiar o inventar cosas para revertir los resultados del 6 de abril y lograr que Liberación quedara en el poder.
SIGUE LA LUCHA
UNIVERSIDAD consultó con el miembro del Partido Liberación Nacional Rolando González, quien fue enfático en que él no estuvo de acuerdo con la renuncia de Araya y que no ha tenido ninguna información sobre intentos de usar planteamientos éticamente cuestionables en la campaña.
“De haber sabido que existiera alguna tendencia de este tipo, hubiera planteado una rotunda oposición; además, estas especulaciones se mecen ante el hecho concreto de que el candidato decidió terminar la campaña política, pero los liberacionistas vamos a ir al proceso del 6 de abril, sin recursos, sin instrumentos publicitarios, pero con la convicción de honrar el derecho al sufragio que es una herencia de don Pepe Figueres y los fundadores de la Segunda República”, enmarcó.
González sostuvo que no ha escuchado nada relacionado con presiones para actuar con una campaña sucia, más que el contenido del documento de Araya, pero que de ser así, podría tratarse de intentos por generar una campaña publicitaria negativa o establecer cuestionamientos contra las otras fuerzas políticas. “Pero esto es absolutamente especulativo, no conocí, ni conozco algún contenido en ese sentido”.
También se trató de entrevistar al presidente del PLN, Bernal Jiménez, sin embargo, no fue posible contactarlo, a pesar de que se le dejaron mensajes en su oficina y en las oficinas del partido.
De acuerdo con Francisco Barahona, esta noticia, que tomó por sorpresa a todo el país, puso al candidato Luis Guillermo Solís y a su dirigencia a hacer un gran esfuerzo de convocatoria a las urnas, para que la ciudadanía se sienta empoderada de que su decisión fue fundamentada. Dicho esfuerzo requerirá de inversión económica, tanto del PAC como del Tribunal Supremo de Elecciones.
“Por otro lado, tengo la impresión de que el candidato de Liberación Nacional ha medido con su decisión, que hay un sentimiento de querer marginar al PLN de un tercer gobierno, y con su renuncia hace que el partido pase a la oposición y se renueve. Esto lo enaltece y queda con la imagen de líder en sacrificio, y eso hay que agradecerlo porque tiende un puente para el diálogo político”, manifestó el especialista.
UNA CAMPAÑA QUE YA HABÍA INICIADO
De acuerdo con Ana Helena Chacón, candidata a la vicepresidencia de la República por el PAC, si Araya habló sobre una campaña sucia es porque ya estaba enterado o se venía haciendo, pues en su criterio no había nada más innoble que decir que la fluctuación del dólar era culpa de Acción Ciudadana.
“Si realmente existía una campaña sucia, esta nace de su misma gente y su misma tendencia; creo que Liberación Nacional no es un partido que regala el poder, tenemos que entender que un líder lleva adelante la lucha hasta el final. Si no hay plata le puedo recordar hace seis meses que no teníamos un cinco, si no hay apoyo, le recuerdo cuando teníamos menos de 3% de apoyo y salimos a la calle y hoy tenemos mayoritariamente la posibilidad de hacer gobierno”, indicó Chacón.
Por su parte, la presidenta de la fracción legislativa del PAC, Carmen Muñoz, coincidió en que la campaña ya estaba montada y en marcha, de lo que no puede estar segura es si Araya era o no partícipe de ella; no obstante, desde su punto de vista, las palabras del candidato del PLN culpan a su partido y al mismo Gobierno de la debacle en Liberación Nacional y pretende quedar fuera para no salpicarse del desastre.
“Lo más reciente fue cuando dijeron que el alza del dólar era culpa del PAC, pero había acusaciones diarias en la Asamblea Legislativa con respecto a nuestras condiciones éticas para defender o dirigir el Estado costarricense. Por ahí decían que el PAC era el partido más corrupto, incluso dijeron que si quedábamos en el poder, igual ellos estaban representados”, explicó Muñoz.
Otros elementos de lo que la diputada denomina como la campaña del miedo, es que se trataron de establecer ligámenes del partido con gobiernos y financiamientos extranjeros.
Lo cierto del caso es que en política nada es casualidad y en su discurso Araya dejó la frase suelta, ya fuera dirigida a alguien o para desmarcarse de la situación.
